lunes, 11 de noviembre de 2013

Libro 8. Los caminos del silencio (Desafío lector pagano).

Libro de Michel Hubant.

La pregunta del primer capítulo es: ¿Estará el silencio hoy en día reservado a los enfermos y a los muertos? Y la respuesta ya la sabemos, es muy obvia.

Yo siempre he sido muy amiga del silencio, de hecho, lo que necesito es hacer justo lo contrario. No es un libro hecho para mí porque no representa ningún debate a mi cabeza pero me sirve para reafirmar lo que practico o, mejor aún, para utilizar esa ausencia de sonido de maneras insospechadas hasta antes de leerlo. (Luego de leer el libro regresé a esta parte de lo escrito y le doy nombre a este silencio del que yo me jacto de poseer.)

Comienzo con las comillas.

1. "El silencio es una escuela de aprendizaje o más bien de reeducación de nuestras facultades de atención para escuchar la música de al creación".

2. "El silencio es una escuela del respeto"."

3. "El hombre no llega a ser él mismo sino en el equilibrio de este doble movimiento: exteriorización, distancia, silencio, reflexión. Algo parecido a los movimientos alternos del corazón que se contrae y se dilata en un latido regular".

4. "El silencio es uno de los derechos fundamentales del hombre".

5. "Si la socialización de nuestras sociedades no está acompañada por una creciente interiorización, vamos al encuentro de graves desequilibrios".

6. "El silencio no es un retiro espacial: es una actitud interior". Y sí, de nada sirve estar en un silencio hacia el exterior si la mente está llena de ruido y de pensamientos vagabundos.

7. "La soledad de nuestros <<desiertos>> es siempre ese tiempo en el que cada uno de nosotros, confrontado con la dura realidad, murmura, como los hebreos, la gran interrogante del hombre: <<¿Hay un Dios en alguna parte y, si lo hay, camina verdaderamente con nosotros?>>".

8. Algunos tipos de silencio:
- De la indiferencia: el decorado de una vida egoísta.
- Del desdén: desdeña desde su sentir superior.
- Del estoico: de la persona que se domina para no verse cobarde.
- Altivo: de grandeza autosuficiente.
- Del orgullo: que no saluda ni admira.
- De la pereza: no quiere gastar sus fuerzas.
- Del necio: no tiene que decir y usa dicho silencio para hacer creer que sus pensamientos son muy profundos.
- Del rencor: rumia sus heridas.
- De la debilidad: teme involucrarse.
- De la cobardía: se preocupa por no comprometerse.
- De la complicidad: asiente en secreto.
- De la traición: que se zafa del testimonio esperado.
***

El libro no me causó mucho revuelo, se quedó en lo superficial o quizá es que no tocó fibras sensibles porque sus referencias en muchas ocasiones eran de ejemplos cristianos, ya que el autor es de esos, cristiano, seguidor franciscano.

Sin embargo, sí me recordó algunas cosas como el cuento de Enrique Serna llamado La vanagloria, en el que el protagonista termina recurriendo al silencio como vía para evitar la falsa notoriedad y así ganar un respeto interno. También se me vino a la mente una amiga que a toda costa quería violarlo con tal de desenmascarar a una persona que, supuestamente, había atentado contra su integridad moral. A esta situación le queda bien la siguiente línea: "Sobre todo es difícil callarse cuando parece que el hombre sin escrúpulos o malvado triunfa" (...).

También aplica aquello de "A veces el silencio es más elocuente (...) porque nuestro hermano no tiene las necesarias disposiciones para oír".
***
La soledad es para todos pero no es para todos. ¿Cómo? Que no todas las personas están habilitadas para enfrentársele en cualquier momento de su vida porque ahí se libran muchas batallas; ahí aparece "el aliado" quizá, del que hablara Castaneda en Viaje a Ixtlán.

Concluyendo, el silencio es la clave de la felicidad.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Datos personales